La salud y el bienestar general necesitan complementarse de manera prudente y racional. Los ejercicios diarios, efectuados de manera regular, fortalecen físicamente y dan elasticidad y flexibilidad, dominio de uno mismo, alegría y sana relajación. De manera individual, en familia, entre amigos o con carácter comunitario, son vehículo de vida plena, acrecentado rendimiento y desarrollo personal.